¿Cada cuánto se debe hacer el mantenimiento de un elevador para prevenir fallas?

Aquellos que administran un edificio seguramente se preguntaron en más de una ocasión; ¿Cada cuánto debería realizarse el mantenimiento del elevador para evitar fallas? No solo para cumplir con las normas o seguir una rutina, sino para prevenir accidentes y garantizar una movilidad segura para todas las personas que utilizan ese elevador a diario.

Entender la importancia del cuidado de los sistemas de movilidad vertical y conocer los factores que inciden en su frecuencia son aspectos fundamentales para asegurar el funcionamiento óptimo de las unidades.

 

La frecuencia ideal: ¿una vez al mes o cada tres meses?

Según las normas mexicanas de mantenimiento para sistemas de transporte vertical, como la NOM-207-SCFI-2018, los elevadores deben ser revisados de forma periódica, al menos una vez al mes, por un profesional certificado. Esto aplica tanto para unidades residenciales como comerciales. Pero, más allá de la regulación, hay que entender que la frecuencia también depende del uso que reciba ese elevador.

No es lo mismo un elevador que mueve a 30 personas por día en un edificio residencial, que uno que transporta a 300 personas por hora en un hospital o en una torre de oficinas. En ambos casos, las exigencias técnicas son diferentes. Por este motivo, los planes de preservación deben adaptarse a cada edificio y no aplicar de forma rígida a un calendario universal.

 

¿Cada cuánto deberías hacer el mantenimiento, entonces?

Si tu edificio es convencional, es decir, de uso habitacional o mixto, una revisión mensual suele ser suficiente, siempre y cuando se realice con profesionales capacitados y con un plan adaptado.

No conviene quedarse únicamente con una cifra general. Lo recomendable es evaluar el uso real del elevador y consultar con una empresa especializada que pueda ofrecer una propuesta transparente y adaptada a las necesidades específicas de tu edificio.

El mantenimiento es una forma de cuidar a las personas que viven, trabajan o transitan por un edificio. Se trata de garantizar que una madre con una carriola, un adulto mayor o cualquier persona puedan desplazarse sin miedo ni sobresaltos. Y eso, aunque no siempre sea visible, marca una diferencia todos los días.

 

¿Qué pasa si no se hace mantenimiento a tiempo?

La respuesta corta es que puede fallar y poner en riesgo a las personas. De hecho, un gran porcentaje de los accidentes en elevadores ocurren por fallas relacionadas con la falta de mantenimiento.

Estas son algunas de las consecuencias más comunes de la falta de mantenimiento o mantenimiento incorrecto:

  • Paradas inesperadas del elevador.
  • Puertas que no cierran o abren correctamente.
  • Movimientos bruscos o pérdida de nivelación.
  • Desgaste de cables, poleas o frenos.
  • Mayor consumo energético por sistemas obsoletos.

En los edificios con alta circulación, por ejemplo, una falla en una unidad puede causar molestias importantes en los usuarios. Esto puede provocar pérdidas económicas o incluso sanciones legales si el equipo no está certificado y actualizado.

 

¿Qué factores influyen en la frecuencia de mantenimiento?

No todos los elevadores necesitan el mismo tipo de atención. Estas son algunas variables que influyen directamente en el calendario de cuidado:

Frecuencia de uso

A más viajes por día, mayor será el desgaste. Siguiendo esta lógica, un elevador que se encuentra ubicado en una torre corporativa va a necesitar más atención que uno de un edificio residencial de baja ocupación.

Antigüedad del equipo

Los sistemas de movilidad vertical más antiguos suelen requerir revisiones más frecuentes, sobre todo si no fueron modernizados. En estos casos, también puede ser conveniente evaluar un proceso de modernización tecnológica.

Condiciones ambientales

Algunas condiciones ambientales como el polvo, la humedad o incluso los cambios de temperatura pueden acelerar el desgaste de algunas piezas. Debido a esto, la ubicación del edificio también influye a la hora de pensar cuando se debe realizar un mantenimiento. 

Tipo de tecnología utilizada

Los sistemas más nuevos tienen la capacidad de realizar diagnósticos más precisos, prácticamente sin la intervención de personal capacitado. En cambio, los sistemas mecánicos más tradicionales necesitan ser revisados de forma manual.

 

El mantenimiento preventivo es la clave para evitar problemas

Este proceso no debería verse como una inversión para evitar costos mayores a largo plazo. En este sentido, OTIS ofrece planes de mantenimiento preventivo personalizados, los cuales permiten detectar pequeñas fallas antes de que se conviertan en grandes problemas.

Este mantenimiento incluye, entre otras cosas:

  • Lubricación de piezas móviles
  • Ajuste de sistemas de frenado y puertas
  • Verificación de motores y controladores
  • Limpieza de componentes sensibles
  • Diagnóstico digital en tiempo real (en modelos conectados)

 

¿Qué propone OTIS para ayudarte?

En OTIS entendemos que no se trata solo de mover personas, sino de hacerlo con seguridad y eficiencia. Por este motivo, desarrollamos soluciones de mantenimiento que se adaptan a cada cliente:

  • Planes mensuales, según el nivel de uso y el tipo de edificio.
  • Asistencia técnica 24/7, para que nunca estés solo frente a una falla inesperada.
  • Modernización eficiente, para reducir el consumo de energía hasta en un 60% gracias al uso de sistemas de regeneración de energía.

Además, una correcta planificación de la conservación de una unidad también incrementa el valor del inmueble. Un elevador en buen estado transmite confianza y minimiza el riesgo de interrupciones en la operación diaria de un edificio. En el ámbito corporativo, esto puede marcar la diferencia en la experiencia de los usuarios.

Si estás evaluando opciones para mejorar el mantenimiento de tus elevadores o simplemente asegurarte de que todo funciona como debería, contáctate con el equipo de OTIS al +528007125473 o visita nuestra página web para conocer nuestros servicios. Estamos para ayudarte con tecnología de vanguardia y un compromiso real con la movilidad vertical segura.