El frío y la mayor demanda de uso ponen a prueba los elevadores: entérate cómo minimizar riesgos y mejorar la experiencia de quienes los utilizan.
El invierno es una de las temporadas altas en hoteles, centros comerciales e incluso en edificios corporativos. Esto trae, como consecuencia, que más personas usen los elevadores al mismo tiempo, lo que se traduce en un mayor desgaste de sus componentes y, en consecuencia, un mayor riesgo de fallas.
En estas condiciones, el mantenimiento preventivo se vuelve fundamental para que cada viaje sea seguro y cómodo. Un elevador fuera de servicio en plena temporada alta puede generar retrasos, incomodidad, impactar de forma negativa en la reputación de una empresa u hotel y, como consecuencia de todo ello, en la experiencia de los usuarios.
El aumento en el uso de los elevadores trae consigo varias implicaciones:
Distintos reportes muestran que la afluencia en temporada alta crece de manera considerable:
En este contexto, cuidar los elevadores en temporada alta es vital para tener una operación fluida y confiable que pueda impactar de forma positiva en la experiencia de todos los pasajeros.
Algunas características propias del invierno, pueden afectar tanto el funcionamiento como la seguridad de los elevadores. Algunos ejemplos son:
Para cuidar un elevador durante el invierno se debe pensar en el equipo como un sistema completo que debe funcionar de manera coordinada. Cada pequeño detalle influye en la seguridad y en la eficiencia de los viajes.
Estos son algunos de los aspectos más importantes que se deben tener en cuenta para mantener tus elevadores en óptimas condiciones durante esta temporada:
Se debe mantener una temperatura uniforme dentro de la cabina y el pozo del elevador para evitar la condensación y proteger los componentes eléctricos de la unidad. Esto es importante en hoteles o edificios de oficinas de gran altura, donde las diferencias de temperatura pueden afectar tanto la operación como la comodidad de los usuarios.
Las salas de máquinas necesitan un aislamiento térmico adecuado para proteger motores y sistemas eléctricos del frío intenso. Revisar regularmente facilita la detección de daños antes de que se conviertan en un problema mayor. Esto asegura que el elevador pueda funcionar sin interrupciones durante todo el invierno.
Aplicar lubricantes resistentes al frío en poleas y rodamientos previene ruidos y desgaste prematuro. Este cuidado asegura que los desplazamientos sean suaves, sobre todo en edificios con un alto flujo de personas.
Verificar periódicamente las baterías de respaldo y probar el sistema de emergencia garantiza que los elevadores funcionen correctamente ante cualquier corte de energía. Esta medida protege a los usuarios y mantiene la operación estable incluso en situaciones imprevistas.
OTIS ofrece soluciones integrales para que tus elevadores funcionen sin problemas durante invierno y temporada alta:
Es importante integrar el cuidado de los elevadores dentro de la planificación de operaciones del edificio. Programar revisiones antes de que comience la temporada alta hace posible la detección de problemas de forma anticipada. Mantener registros de mantenimiento y revisar las recomendaciones de OTIS son prácticas que reducen riesgos y optimizan la operación.
Además, comunicar a los usuarios sobre medidas preventivas y protocolos de seguridad genera confianza y asegura que todos comprendan la importancia de un uso responsable del elevador durante épocas de mayor demanda.
¿Quieres asegurarte de que tus elevadores sigan operando con total seguridad y eficiencia durante el invierno y la temporada alta? En OTIS contamos con soluciones a la medida. Nuestro equipo está listo para acompañarte y adaptar cada servicio a las necesidades específicas de tu edificio para garantizar viajes más confiables y seguros. Contáctate con nuestros especialistas al +528007125473 o visita nuestra página web para más información.